jueves, 22 de abril de 2010

Viejas joyas. Simbolismo y adornos personales entre homínidos "arcaicos"

Durante buena parte del último cuarto del siglo XX, la investigación sobre el Hombre de Neandertal estuvo dominada por un modelo que lo retrataba como un homínido muy arcaico, con serias limitaciones cognitivas, sin apenas lenguaje e incapaz de tener un comportamiento realmente "humano".

En contraste, se creía que el Paleolítico superior había supuesto una revolución cultural. Los humanos "anatómicamente modernos" eran la única población plenamente simbólica. Tenían comportamientos complejos y un lenguaje elaborado. Sus capacidades mentales les daban ventajas en cuanto a armamento de caza, redes de intercambio, movilidad, etc. Esa gente había barrido a la última población arcaica, los Neandertales, entre hace 50.000 y 30.000 años.

Se articulaba así una explicación evolutiva muy simplista: Un cerebro superior produce una cultura superior, y eso lleva necesariamente a la sustitución de neandertales por "modernos", por competencia evolutiva y selección natural.

Hoy este modelo se ha desmoronado por completo. Algunos todavía se aferran a él, pero empiezan a parecerse al capitán del Titanic o los últimos de Filipinas. Por una parte, la práctica totalidad de las supuestas ventajas prácticas (utillaje, caza, organización, movilidad) de la cultura de los "modernos" se ha descubierto que o bien eran practicadas por los Neandertales, decenas de miles de años antes del contacto, o bien no eran tan ventajosas.

Por otro lado, se ha demostrado que, aunque los neandertales no utilizaron adornos y objetos decorativos durante la mayor parte de su historia, esas manifestaciones culturales florecieron entre las poblaciones –supuestamente- arcaicas, durante varios milenios antes de su desaparición.

En este post voy a abordar esa cuestión: La presencia de adornos personales, simbólicos, entre poblaciones “arcaicas”, diferentes de los "humanos anatómicamente modernos".

En la primera parte, revisaré todas las evidencias que se pueden vincular con seguridad a los neandertales, y también hablaré un poco de los indicios más dudosos. En la segunda parte, trataré la espectacular cultura material asociada al homínido recientemente descubierto (por un análisis de ADN mitocondrial), en la Cueva de Denisova (montañas de  Altai, Siberia).

Adornos neandertales

Los primeros objetos de adorno personal de los neandertales datan del final del Paleolítico medio (hace algo más de 50.000 años) y provienen de España. En Cueva de los Aviones y Cueva Anton (región de Murcia) se han encontrado varias valvas de moluscos marinos. Esas conchas fueron recogidas ya ”sueltas”  (de moluscos muertos), a la orilla del mar.


Hubo una selección, siguiendo unos criterios: tamaño, que estuvieran completas y que tuvieran ya una perforación natural. Después, los neandertales las llevaron a sus campamentos (en el caso de Cueva Antón, un viaje de unos 60 km). Allí fueron decoradas con pigmentos minerales bastante elaborados (mezclando dos o tres minerales de tonos rojizos o amarillentos).


En la Cueva de los Aviones también se encontró una concha de otro molusco más redondo y cóncavo (Spondylus gaederopus), con bastantes restos de ocre en su interior. No tiene perforación y se interpreta más bien como un contenedor para los pigmentos minerales.


 Los elementos decorativos, modificados para ser suspendidos con cordones, se conocen con seguridad en dos culturas neandertales del Paleolítico superior. De ellas, una está conectada directamente con restos humanos (algo insólito a comienzos del Paleolítico superior).


Se trata del Chatelperroniense, que es también la cultura que ha dado más colgantes y objetos simbólicos neandertales. Han aparecido ocho colgantes de diente perforado en Quinçay,  y veintiseis en la Grote-du-Renne (junto con otros catorce objetos decorados).


En Saint-Cesaire, aparecieron varias conchas tubulares de Dentalium. Según algunos autores estaban asociadas a un enterramiento neandertal.  Hay evidencias en el Chatelperroniense de Caune de Belvis (dos conchas de Turritela temprina), pero más dudosas, por lo limitado del registro.

El Uluzziense de Italia y Grecia también tiene adornos personales. Esa cultura no está asociada directamente a restos humanos, excepto algunos dientes que entrarían dentro del “tipo” neandertal. Sin embargo, existe una amplio consenso en ese tema: el Uluzziense tiene una total afinidad con el Musteriense final de la región, y bastantes parecidos con el Chatelperroniense francés. Además, no se ha encontrado ninguna relación con el Auriñaciense de los "modernos".  Es, por tanto, una cultura neandertal.

Los objetos simbólicos hallados en sitios uluzzienses son fragmentos tubulares de Dentalium. Han aparecido en Grecia (Klisoura 1) y en Italia (Cueva del Caballo). Hay otro indicio, pero mucho más dudoso: dos moluscos perforados de la Cueva del Caballo. Pero estos restos podrían provenir de una ocupación Auriñaciense justo por encima del Uluzziense.

Hay otras pistas, también dudosas, pero que en conjunto sugieren que el uso del colgantes era común entre los últimos neandertales de toda Europa. El Bachokiriense es una cultura del Paleolítico superior inicial de Bulgaria, y sus raices pueden estar en el Musteriense local. En el yacimiento principal de esa cultura,  Bacho-Kiro, se halló un colgante de hueso.


Situaciones similares se producen en el Paleolítico superior inicial de Wilendorf II en Austria, de Ilsenhöle en Alemania y Trou Margrite en Bélgica. A pesar de varias dudas razonables, esos materiales y culturas se pueden considerar, en general, anteriores a la aparición del Auriñaciense "moderno" en Europa. Y, en algunos casos, están asociados a restos humanos fragmentarios de posibles neandertales. En la mayor parte de los casos, el avance de las investigaciones podrá decirnos, en unos años, si realmente se trata de culturas neandertales o no.

Los adornos de las gentes de Denisova

En la Cueva de Denisova, en las montañas Altai de Siberia, se conocía desde hace tiempo una rica cultura material del Paleolítico superior inicial. En el nivel arqueológico denominado “11”, se encontraron colgantes perforados y otros adornos hechos de dientes, huesos de animales, marfil de mamut y minerales blandos. Entre esas piezas, destaca un delicado brazalete de piedra verde, del que se encontraron varios fragmentos.

Lo más sorprendente es que, entre esos materiales, de rico y complejo simbolismo, se hallaron algunos restos humanos aislados. Uno de esos restos es un hueso de la mano de una mujer joven, que fue analizado para conocer su ADN mitocondrial (ADNmt).

Los resultados de ese análisis los he recogido en otro post, pero vale la pena recordar lo básico: El ADNmt nos dice que pertenece a un linaje distinto a todos los humanos “modernos”. También es diferente a todos los neandertales estudiados hasta ahora (que son muy pocos). Además, la comparación de datos del ADNmt predice que la mujer de Denisova estaría al doble de distancia genética de los “modernos” que los neandertales.
  
Lo que se deduce (por ahora) de estos datos es que se trata de una población asiática de una  humanidad “arcaica”. Y no tiene lazos genéticos próximos con las poblaciones africanas (me refiero, en concreto, a las gentes de las que descendemos los “humanos modernos”).

Eso significa, dicho de forma llana, que o bien es una población neandertal desconocida hasta la fecha, o bien una población “arcaica” igualmente desconocida. En ese último caso, la mujer podría ser descendiente de los Homo erectus asiáticos. Dentro de unos meses se publicarán los resultados del ADN nuclear de la mujer de Denisova, y tendremos más datos para juzgar que suposición es la más acertada.

Pero quiero resaltar otro aspecto de este tema: Hasta el momento, se ha dado mucha importancia al ADNmt y a la genealogía evolutiva, y se ha pasado de puntillas sobre los (impresionantes) materiales arqueológicos del nivel 11 de Denisova.
 

Por supuesto, con las excavaciones y trabajos en curso, sabremos más y tendremos más datos, materiales y dataciones, dentro de algún tiempo. Pero hoy por hoy, la evidencia señala en mi opinión a un hecho concreto, con inesperada crudeza:

Con un homínido “arcaico” y una cultura de tal simbolismo complejo en el mismo horizonte cultural (11), debemos abandonar definitivamente la preconcepción de que “modernidad” biológica y modernidad "cultural" son necesariamente lo mismo. Al menos, en ese periodo crucial de la historia humana (entre hace 50.000 y hace 30.000 años).


Fuentes

14 comentarios:

Maju dijo...

Por otro lado, a mí hay una detalle de la secuencia neandertal que me escama y parece muy importante: no usaban adornos (que se sepa) antes de c. 50,000 BP, es decir, más o menos cuando se produce el contacto con nuestra especie. El segundo contacto de hecho, puesto que hubo un primer contacto en Palestina c. 130,000 BP.

Por contra en H. sapiens está bastante bien documentado el uso de colgantes y ocre desde aproxidamente esas fechas (Palestina), c. 90,000 BP (África del Norte) y c. 75,000 BP (Soudáfrica).

Hay diversas teorías del por qué este desarrollo del simbolismo estético pero a mí me llamó la atención una que sugería que la complejidad cultural aumenta con la densidad demográfica. Yo en este momento estoy adoptando una variante de esta hipótesis (de mi cosecha) que más que el simple número de personas se basaría en la existencia de interacciones entre grupos de cultura más o menos diferente. O sea: no serían tanto el número de gente sin más sino la cantidad de interacciones entre gente de culturas diversas, el "cosmopolitismo" por así decirlo, lo que induciría el aumento de la complejidad cultural (y sus expresiones fósiles).

Me explico: cuando un joven (principalmente, ya que son los más abiertos y creativos por naturaleza) interactúa sólo con gente de su propia cultura tiende a reforzar los valores ancestrales en una dinámica que podríamos calificar de "conservadora" o "tradicionalista". Simplemente no hay más y probablemente las innovaciones tienden a ser rechazadas, salvo que sean muy prácticas. Por contra, cuando ese joven interactúa, aunque sea de forma ocasional, con gentes de diferente cultura, su mente se abre a otras posibilidades (el aldeanismo se cura viajando) y es más fácil que la comunidad en su conjunto adopte algunos de estos elementos.

No sé muy bien si los H. sapiens empezaron a expresarse simbólicamente tras el primer contacto con los neandertales o si esto se produjo meramente por la propia expansión y diversificación inicial sapiens. Pero me inclino a pensar que los nenandertales adoptaron algunos de estos elementos precisamente por la interacción con nuestra especie (en una cadena seguramente compleja que es difícil de desentrañar).

Este "retraso" neandertal se produciría no por que fueran "tontos" sino porque eran pocos y poco diversos, como parece indicar su ADN. Evidentemente no estaban intelectualmente incapacitados para apreciar la belleza estética pero no encontramos muestras de este tipo de expresión hasta el final de su (pre-)historia, justo cuando los H. spaiens empiezan a invadir su territorio. De la misma manera que tampoco encontramos tecnología de hoja en abundancia (clásicamente definitorias del PS en Eurasia Occidental) hasta ese momento.

Por ello yo entiendo que, muy probablemente, fue el cosmopolitismo forzado sobre ellos por la inmigración sapiens lo que disparó esta inquietud estética y tecnológica entre los neandertales.

Ahora bien, comprender los detalles del proceso en su totalidad probablemente sea imposible.

Salud.

Maju dijo...

Voy a hacer de abogado del diablo, sacando a la luz las contradicciones potenciales de las que no te haces eco, Millán. Y es que eres un poco unilateral, entiendo yo.

Por un lado, la verdad es que no sabemos lo suficiente sobre las culturas transicionales PM-PS en Europa. No sabemos a ciencia que homíninos las hicieron y una referencia inevitable es Hoffecker 2009 para quien al menos el Bohuniciense (incl. Bacho Kiro), así como el Protoauriñacense, son obra de nuestra especie (basándose en sus afinidades íntimas con las culturas de Palestina: Ahmariense y Emirense). De esa época inicial también tenemos Kostenki que es sin duda producto del H. sapiens. Para Hoffecker (y seguramente otros), el Auriñacense en sí es una cultura específicamente europea derivada del Bohuniciense.

La mayor duda está en el Uluzziense italiano. Hoffecker argumenta en favor de una identidad tentativa H. sapiens basándose en elementos decorativos pero este argumento es débil en principio.

En el caso de Altai (Denisova, etc.), nos encontramos de nuevo con una zona transicional, en la que la secuencia general comienza con un Musteriense hecho por neandertales y termina con una industria auriñacoide hecha por Homo sapiens. La transición no se entiende bien todavía sin embargo. La presencia de un posible H. erectus (per Krause-2010) complica incluso más la comprensión. Pero esta incertidumbre no quiere decir que todo lo que se encuentre ahí sea "neandertal" (ni lo contrario, claro).

(continúa)

Millán Mozota dijo...

El Protoauriñaciense parece que se parece mucho a su pariente putativo palestino, como dices (en la lítica). En el caso de Bohuniciense y Bachokiriense yo diría que no pero es cierto que el registro se podría mejorar.

Kostienki es como posterior a las industrias "transicionales", creo.

Las industrias de las Altai: A mi me parece que, por ahora, la evidencia nos sugiere que -con cosas como Denisova nivel 11- mejor ser prudentes y no muy categóricos, porque la sorpresa acecha detrás de cada análisis de ADN siberiano. En Okladinov ya les salío un neandertal cuando creo que no se lo esperaban para nada, y ahora lo de Denisova!

Muy cierto el apunte de las fechas (50.000 para neandertales, 90000 para sapiens). Lo único matizar que los comportamientos simbólicos en África del sur hacen un poco el "submarino": Aparece uno, se utiliza durante 10 o 20 mil años, y luego desaparece, pasan varios milenios y aparece otro distinto... etc. No es algo constante y progresivo, lineal.

Muy interesante tu idea de la interacción social.

Gracias por los comentarios.

Maju dijo...

"Kostienki es como posterior a las industrias "transicionales", creo".

Los restos humanos son más recientes pero la cultura (para Hoffecker con afinidades auriñacoides y más tarde claramente influída por el Auriñacense) es del mismo período transicional anterior a la fecha crítica de 40,000 BP, ya que la ceniza de la super-erupción de Campania se encuentra en estratos intermedios.

Sin embargo leo ahora en Wikipedia (referenciado a Anikovich 2007) que los estratos bajo la ceniza corresponderían a una cultura similar al Szletiense, que a su vez se considera similar al Chaterlperronense y que por lo tanto podría ser Neandertal.

No sé, supongo que hay diferentes lecturas posibles.

"Las industrias de las Altai: A mi me parece que, por ahora, la evidencia nos sugiere que -con cosas como Denisova nivel 11- mejor ser prudentes y no muy categóricos"...

Sí. Totalmente de acuerdo. Aún así yo sí entiendo que, sea como sea el detalle, la secuencia en su conjunto claramente sugiere el mismo proceso que en Europa grosso modo. Sin embargo también nos encontramos con una apariencia de continuidad estratigráfica, cosa que es al menos rara en Europa. Ya veremos.

"os comportamientos simbólicos en África del sur hacen un poco el "submarino": Aparece uno, se utiliza durante 10 o 20 mil años, y luego desaparece, pasan varios milenios y aparece otro distinto... etc. No es algo constante y progresivo, lineal".

Sí. Eso es lo que argumentan los autores de la teoría original sobre la densidad como generadora de complejidad cultural a construir su teoría. Sin embargo ya te digo que you más bien creo en una variante de mi cosecha.

De todas formas, aunque nos falten muchos elementos de juicio, hay una curiosa continuidad conceptual entre el uso de conchas y ocre en el PM africano (y palestino) y el uso de conchas y ocre en el PS eurasiático e incluso en la realidad cotidiana de algunos pueblos africanos modernos como los Himba. Por tanto yo me inclinaría por pensar que, aunque nos falten los fósiles, debió de haber continudidad y que las fechas que tenemos son las más tardías posibles para el inicio de estos comportamientos.

Ahora bien, la mayoría de la expresión simbólica (y tecnológica) humana es perecedera. Las canciones y los bailes no dejan fósiles, ni lo hacen las leyendas, ni los adornos de plumas, etc. O sea que tampoco nos vale para decir: antes de esto no había expresión simbólica alguna. A lo más podremos pensar que quizá no hubiera expresión simbólica en esos parámetros (ocre, conchas) pero seguramente la habría en otros.

"Muy interesante tu idea de la interacción social".

Gracias. :)

Jesús P. Zamora Bonilla dijo...

¿Y no tenían osito de Tous?
¡Qué cutres!

Millán Mozota dijo...

Tal vez si:
Copito de Tous

Language Continuity dijo...

Hola, estoy empezando a descubrir este blog y me parece de lo más interesante. Se hace necesario revisar contínuamente nuestra manera de entender la prehistoria, aunque también es verdad, como apunta Maju, que no conviene echar las campanas al vuelo rápidamente. Quedan muchas piezas por colocar en el puzle de la evolución humana. La idea de la monogénesis africana del H. Sapiens no está ni mucho menos tan desacreditada como sugiere el autor de este blog. Más bien todo lo contrario: los estudios de genética poblacional parecen corroborarlo, o al menos parecen indicar que en el marco general de la 'evolución' humana existió una emigración desde África que marcó de manera decisiva el futuro de los homínidos en la tierra.

En cualquier caso, sigo atento y leyendo.

Millán Mozota dijo...

Gracias por los comentarios.

Este blog tiene una determinada agenda: divulgar una visión científica y actualizada de la complejidad cultural Neandertal, documentada arqueológicamente.

Sólo toca a veces -es inevitable- la evolución humana y genética de poblaciones.

Por otra parte, es importante romper con la subordinación de la discusión cultural e histórica (registro arqueológico, abundante y expresivo)a los modelos paleoantropológicos (registro escaso y escueto).

No le veo el sentido a explicar cuestiones que son culturales e históricas (modos de vida, organización e interaccion social, economía, etnicidad...)de forma subordinada a investigaciones cuyo interés se centra en establecer taxonomías, filogenias y cambios demográficos de las poblaciones homínidas del pasado -con todo lo importante que me parece, no digo lo contrario.

Tampoco quiero decir que haya que prescindir de los datos de la paleontología humana y la genética de poblaciones. Al contrario, hay que usarlos, son una parte fundamental de la información para construir explicaciones históricas (pero no la única, ni necesariamente la más relevante en todos los casos).

Discutir la "monogénesis africana del H. Sapiens", ya se hace en otros sitios, de los que mi favorito es el weblog de John Hawks.

Maju dijo...

"Discutir la "monogénesis africana del H. Sapiens", ya se hace en otros sitios, de los que mi favorito es el weblog de John Hawks weblog de John Hawks".

Hawks tiene opiniones interesantes a veces pero, al no permitir comentarions, más que discusión es un monólogo. :)

Yo no le sigo ya más por esa razón sobre todo. Y bueno, es muy "evolucionista clásico" en el sentido de que todo alelo ha de ser producto de la selección, cuando en realidad la mayoría son producto del azar.

Pero sí que a veces tiene artículos muy interesantes. A veces.

Anónimo dijo...

Ahora que lo estoy leyendo detenidamente... ¿Por qué dices que corresponde a una mujer joven el resto óseo de Denisova? ¿Es por la constitución grácil?
En el análisis del DNA la llamaron "mujer x" en alusión al mitocondrial pero ahora no se si era un apodo o se basaban en otra cosa además.

Un saludo.
Hellen.

Millán Mozota dijo...

Tienes mucha razón en lo de "la mujer", Hellen.

Revisando los artículos y notas de prensa, no he encontrado que ningún análisis haya determinado el sexo del individuo.

Dado que sólo se ha estudiado en ADNmt y que el resto humano era un hueso del meñique de un individuo muy joven, creo que en realidad tanto puede ser un varón como una mujer. Soy un ignorante de anatomía, pero no creo que con ese único resto se pueda determinar el sexo.

Pienso que la confusión puede deberse a una de estas dos causas:

- O se usó el término "mujer X" para referirse a la "eva" mitocondrial de este linaje, y luego se confundió (en la prensa y los blogs de ciencia) esa "eva" con el fósil de Denisova.

- O bien los investigadores que han hecho el análisis (y otros allegados) tienen más datos que se refieren el sexo del individuo, que todavía no se han publicado.

¿Podría determinarse el sexo con un análisis de ADN nuclear? Espero que tu, Hellen, nos puedas aclarar ese extremo (o quizás Maju).

Maju dijo...

"¿Podría determinarse el sexo con un análisis de ADN nuclear?"

En general sí, claro. O es XX (mujer), o es XY (hombre). Ahora bien ha de poder reconstruirse (no tan fácil: por algo usan mtDNA sólo la mayoría de las veces). Desde luego yo no he leído en ningún lado nada de ADN nuclear en este caso. Pero si el especimen de Denisova fuera varón, en todo caso su mtDNA viene de su madre y de una larga lista de "abuelas" sucesivas.

Millán Mozota dijo...

si, me refería a _ese_ tipo de ADN fósil (antiguo, fragmentario) no al ADN actual, lo de XX-XY me lo sé :)

Anónimo dijo...

Perdón, uno de los problemas de no suscribirme es que se me olvida responder. Que yo sepa, si se aislaran secuecnias como la del SRY (Sex determining Region Y, presente en el cromosoma) o el de amelogenina (en geles, en las muestras de DNA de hombres aparecen dos bandas y en mujeres una porque son dos regiones homólogas en X e Y pero con distinta longitud). Esto se hace en genética forense (y a veces hay problemas, siempre hay alguna excepción pero bastante remotas)pero, si ya dista tanto de H. sapiens y, teniendo en cuenta que el par de XY es de las regiones que mayor presión evolutiva ha sufrido comparándolo con el del chimpancé, pufff, no se, no se.

Hellen